COMITÉ EDITORIAL  
Dr. Pablo Elías Vargas González  
El Colegio del Estado de Hidalgo  
Dr. Carlos Roberto Martínez Assad  
Instituto de Investigaciones Sociales Universidad  
Nacional Autónoma de México  
Dra. Margarita Rosa Camarena Luhrs  
Instituto de Investigaciones Sociales,  
Revista de Estudios Regionales  
Universidad Nacional Autónoma de México  
"
Nueva Época"  
Dr. Javier Delgadillo Macías  
Instituto de Investigaciones Económicas, Universidad  
Nacional Autónoma de México  
DIRECCIÓN  
Dr. Pablo Elías Vargas Gonzàlez  
Dr. José Gasca Zamora  
Director General  
Instituto de Investigaciones Económicas,  
Universidad Nacional Autónoma de México  
El Colegio del Estado de Hidalgo  
COORDINACIÒN  
Dr. Héctor Manuel Cortez Yacila  
Dra. Patricia Catalina Medina Pérez  
El Colegio de Tlaxcala, México  
Jefa Editora de la Revista de Estudios Regionales  
Nueva Época  
Dr. Adolfo Sánchez Almanza  
Instituto de Investigaciones Económicas, Universidad  
Nacional Autónoma de México  
El Colegio del Estado de Hidalgo  
EDICIÓN  
Dra. Enid Adriana Carrillo Moedano  
Dr. Germán Vazquez Sandrin  
Jefa Editora del Consejo Editorial  
El Colegio del Estado de Hidalgo  
Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo  
Dr. Maximiliano Gracia Hernández  
El Colegio del Estado de Hidalgo  
Dr. Edgar Manuel Castillo Flores  
El Colegio del Estado de Hidalgo  
Dr. Edgar Iván Roldán Cruz  
El Colegio del Estado de Hidalgo  
REVISTA DE ESTUDIOS REGIONALES, Año 1, No. 2, julio-diciembre 2023, es una publicación semestral editada por El Colegio del Estado de Hidalgo.  
Edifcio Tecnología. Blvd. Circuito La Concepción No. 3, C.P. 42162, Exhacienda de la Concepción. San Agustín Tlaxiaca, Hidalgo. Teléfono 7711383079,  
http://wwwelcolegiodehidalgo.edu.mx:81/index.php/revista, rerne@elcolegiodehidalgo.edu.mx. Editor responsable: Patricia Catalina Medina Pérez. Reserva  
de Derechos al Uso Exclusivo No. 04-2022-120512154400-102, ISSN 2992-7269/ E-ISSN 2992-734X, otorgados por el Instituto Nacional del Derecho de Autor,  
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Queda prohibida la reproducción total o parcial de los contenidos e imágenes de la publicación sin previa autorización de El Colegio del Estado de Hidalgo.  
Contenido  
Prólogo  
3
El capital territorial: un nuevo aporte interpretativo e instrumental para el  
desarrollo regional  
8
Suárez-Paniagua, S  
Capital social y acción colectiva para consolidar el MIAF mazahua  
26  
Pillado-Albarrán, K. ; Albino-Garduño, R; Santiago-Mejía, H. Pedraza- Mandujano, J.  
Espacio y sentidos: análisis de percepción ambiental del espacio público  
vecinal.Caso parque urbano San Antonio, Pachuca, Hidalgo (México)  
Carrillo-Moedano, E.  
46  
64  
80  
98  
116  
Ciudad/Frontera: la producción del espacio de Ciudad Juárez en tiempos  
neoliberales  
Jiménez-León, P. & Saracho-López, F.J.  
Antsivinik: región de la migración por orientación sexual en las etnias  
de Chiapas  
Corona-Ruíz, J.A & Chacón-Reynosa, K.J.  
Ÿ
utinas cartográ¡cas indígenas. La construcción del territorio entre los  
mixes de Oaxaca.  
Zolla-Márquez, E.  
Comunidades de Quintana Roo y el Tren Maya: las transformaciones  
territoriales y su aprovechamiento  
Ken-Rodríguez, C. A, Monroy-Aguilar, S. González-Fonseca, F.I.  
Dimensión psicosocial líquida en los ¥ujos rurales urbanos: miradas  
desde la adolescencia en Viacha - Bolivia  
146  
Calle-Quispe, V.S. Bascopé-Guzmán, H.  
En búsqueda de la gobernanza ambiental multinivel: elementos  
conceptuales para el debate contemporáneo  
Moreno-Plata, M.  
162  
Dinámica de rutinas: aportes para el estudio de la gobernanza  
multiniveles  
184  
204  
214  
Morales-Barragán, F.  
Espacio, sentido y poder: apuntes sobre la desfetichización del espacio  
López-Fieldman, A.  
Región y corporalidades. Un abordaje desde los estudios regionales  
Miranda-Pérez, L.  
Una mirada a los procesos agroecológicos presentes en mercados alternativos en  
Oaxaca de Juárez y en la Ciudad de México: propuesta metodológica basada 228  
Pérez-Tapia, L.V  
Emociones y medio ambiente. Un enfoque interdisciplinario  
256  
Sandoval-Méndez, G.  
Territorios para la vida. Mujeres en defensa de sus bienes naturales y por la  
sostenibilidad de la vida  
260  
Vázquez-Ibarra, C & Reyes-Ánge- les, A.  
P R Ó L O G O  
Dr. José Gasca Zamora  
Editor invitado  
Desde la década de los noventa del siglo XX se percibe un mayor interés por  
incorporar distintas categorías para tratar de comprender la dimensión ma-  
terial e inmaterial del desarrollo, la complejidad social y ambiental, así como  
las interacciones y el papel de los actores e instituciones en la sociedad con-  
temporánea. En esa tarea, conceptos como espacio, territorio y región han  
recobrado una creciente importancia en la construcción teórica-conceptual y  
metodológica de distintas ciencias y campos multi e interdisciplinarios.  
En México, la comunidad académica viene explorando con mayor fuerza en  
la última década distintas vetas de investigación que recuperan estas categorías  
bajo renovados enfoques que apuntan hacia un examen crítico social y huma-  
nista de los estudios espaciales, territoriales y regionales de nuestros tiempos.  
Este segundo número temático de la Revista de Estudios Regionales Nueva Épo-  
ca está dedicado a trabajos que re‘exionan y discuten tales categorías a la luz  
de miradas sociales, culturales, políticas y económicas. Los diez artículos de  
investigación y los tres de re‘exión ofrecen pistas de la variada agenda de in-  
vestigación que distingue los estudios regionales y territoriales y revelan, desde  
re‘exiones teóricas, experiencias y estudios de caso, su valor para comprender  
la producción social del espacio desde las formas de apropiación, percepciones y  
representaciones; las complejas interfaces y escalas socioespaciales, las lógicas  
territoriales de los actores, las identidades y estrategias de regionalización y  
territorialización, así como los mecanismos presentes en la apropiación, dis-  
puta, cooperación gestión y gobernanza territorial.  
El artículo: “El capital territorial: Un nuevo aporte interpretativo e instru-  
mental para el desarrollo regional”, ofrece un panorama analítico del enfoque del  
capital territorial, su planteamiento sugiere considerar activos materiales e inma-  
teriales como eje teórico que posibilita la elaboración de propuestas metodológi-  
cas para medir las capacidades de los territorios y sus actores.  
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3 |  
El trabajo: "Espacio y sentidos: análisis de percepción ambiental del espacio público  
vecinal. Caso parque urbano San Antonio, Pachuca, Hidalgo (México)" analiza las  
interpretaciones ambientales en cuanto a relación entre los elementos materiales  
de un parque vecinal y las percepciones que genera en las personas usuarias del  
espacio.  
La propuesta: “Capital social y acción colectiva para consolidar la Milpa In-  
tercalada con Árboles Frutales Mazahua” identižca la centralidad del capital so-  
cial y la acción colectiva para el fortalecimiento del grupo de productores estu-  
diados.  
El texto: “Ciudad/frontera: la producción del espacio de Ciudad Juárez en  
tiempos neoliberales”, ilustra cómo el espacio, la frontera y la macrorregión de  
América del Norte se entrelazan para asentar el desarrollo desigual entre dos  
ciudades contiguas entre la frontera México-Estados Unidos.  
El resultado de investigación: “Antsivinik: región de la migración por orien-  
tación sexual en las etnias de Chiapas”, analiza una región en la que destaca la  
migración por orientación sexual en juventudes indígenas, en la que identižca el  
papel clave de las corporalidades como elementos que reconstruyen y resigniž-  
can los desplazamientos migratorios territoriales.  
El estudio: “¢utinas cartográžcas indígenas. La construcción del territorio entre  
los mixes de Oaxaca”, da cuenta de los mecanismos de construcción del espacio y el  
territorio entre los pueblos mixes o ayuujk de la Sierra Mixe de Oaxaca. El texto ilus-  
tra de manera etnográžca los mecanismos de construcción territorial que dižeren  
de las formas cartográžcas hegemónicas, las cuales están arraigadas en el ritual, el  
parentesco y las prácticas cotidianas de uso y habitación del territorio.  
El artículo: “Comunidades de Quintana Roo y el Tren Maya: las transforma-  
ciones territoriales y su aprovechamiento”, desarrolla una propuesta metodoló-  
gica que permite estimar el aprovechamiento de la presencia del Tren Maya por  
los habitantes de Quintana Roo, la propuesta destaca el tipo y tamaño de centros  
de población involucrados directa e indirectamente en la ruta del tren, las condi-  
ciones de vida de la población y la estructura productiva.  
Por su parte, el trabajo: “Dimensión psicosocial líquida en los ‘ujos rurales ur-  
banos: miradas desde la adolescencia en Viacha-Bolivia”, busca comprender lo  
que denomina “la dimensión psicosocial líquida” en los ‘ujos rurales urbanos  
desde la perspectiva de la adolescencia en el Municipio de Viacha en Bolivia y sus  
perspectivas respecto a los fenómenos de migración de jóvenes adolescentes. Sus  
resultados manifestaron que la dimensión psicosocial de los y las adolescentes  
respecto a su socio espacio, presenta un conocimiento ampliado del territorio en  
una clara distinción entre lo abierto (lo rural) y lo cerrado (la ciudad), estas dife-  
rencias demarcan valores que son otorgados de manera positiva para el espacio  
rural sustentado en su comunidad, sin embargo su perspectiva a mediano y largo  
plazo es la de aportar al proceso de la multilocalidad, desde la doble residencia  
urbana-rural.  
El texto: “En búsqueda de los nuevos espacios institucionales para la gober-  
nanza ambiental multinivel”, lleva a cabo una revisión del estado del arte y una  
metodología hermenéutica que permitió el estudio prospectivo y retrospectivo  
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4 |  
Julio-diciembre 2023| Revista Nueva Época |Vol.1 Núm, 2  
sobre las piezas institucionales fundamentales que permite explicar los fun-  
damentos de la gobernanza ambiental multinivel.  
En el mismo tenor, la investigación: “Dinámica de rutinas: aportes para  
el estudio de la gobernanza multiniveles”, recupera el debate en torno a la go-  
bernanza multinivel. Revela que las rutinas no han ocupado un lugar explícito  
en estas re‘exiones, al mismo tiempo permite ubicar enunciados genéricos  
que ofrecen vetas susceptibles de explorarse para incorporar las rutinas en el  
análisis.  
El trabajo: “Espacio, sentido y poder: apuntes sobre la desfetichización  
del espacio”, aborda las relaciones conceptuales entre espacio, sentido y po-  
der enfatizando la necesidad de desfetichizar tanto las espacialidades como  
el llamado “giro espacial”. Desde esta perspectiva, considera que el principal  
aporte de dicho “giro” no está en lo que reduce, sino en lo que enfatiza, en lo  
que permite mantener en tensión analítica a la hora de pensar las espacialida-  
des como procesos históricos, globales y en con‘icto.  
La propuesta: “Región y corporalidades. Un abordaje desde los estudios re-  
gionales”, discute cómo los estudios regionales representan un campo de estudio  
heurístico y multireferencial sobre lo regional. Los aportes, en este caso, de la  
economía, la historiogra§ía, la antropología, la sociología y la geogra§ía permiten  
profundizar la mirada de estudio y ser punto de partida a las diversas formas de  
regionalizar  
Finalmente, el artículo: “Una lectura escalar de procesos agroecológicos  
presentes en mercados alternativos de Oaxaca de Juárez y de Ciudad de Méxi-  
co”, se propone entender la contribución social de las personas y sus procesos  
y prácticas agroecológicas reivindicativas de autosužciencia realizadas en la  
cotidianidad sobre las condiciones materiales para la reproducción de las re-  
laciones sociales de producción, se presenta una lectura-interpretación que  
aborda su realidad desde las diferentes escalas del análisis geosocial.  
Esperamos que este conjunto de trabajos de nuestro segundo número de  
la revista anime el interés para ampliar el conocimiento y discutir aspectos  
cruciales que coadyuven a comprender las variadas expresiones, interaccio-  
nes, experiencias y prácticas de nuestra sociedad contemporánea a partir de  
su espacialidad, territorialidad y regionalidad.  
Dr. José Gasca Zamora  
Investigador titular del Instituto de Investigaciones Económicas de la Universidad  
Nacional Autónoma de México  
SNI III.  
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Vol.1 Núm, 2 | Revista Nueva Época | Julio-diciembre 2023  
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ARTÍCULOS  
CIENTÍFICOS  
Vol.1 Núm, 2 | Revista Nueva Época | Julio-diciembre 2023  
Recepción: 03/11/23  
Aceptación: 15/01/24  
El capital territorial: un nuevo aporte  
interpretativo e instrumental para el  
desarrollo regional  
https://doi.org/10.59307/rerne1.244  
Suárez-Paniagua, S. Universidad Nacional Autónoma de Mexíco  
https://orcid.org/0000-0003-1379-1801  
Resumen  
n los últimos años han surgido nuevas perspectivas de análisis  
sobre los espacios regionales y sus posibilidades de desarro-  
E
llo, las cuales muestran un abordaje interdisciplinario y transdis-  
ciplinario en torno a los conceptos recientes de espacio, territorio y  
región, así como de los avances en la agenda de investigación sobre  
los factores que inciden sobre el logro de competitividad y desa-  
rrollo regional. El propósito de este artículo es analizar el enfoque  
del capital territorial, sus planteamientos teóricos y propuestas me-  
todológicas, así como examinar sucintamente su aplicación en una  
investigación realizada con la ꢀnalidad de veriꢀcar su preeminencia  
teórica e instrumental. Los resultados de nuestro análisis sobre el  
estudio realizado conꢀrman que el soporte teórico, las propuestas  
metodológicas y la evidencia empírica del enfoque del capital te-  
rritorial son transcendentes porque permiten vislumbrar factores  
tangibles e intangibles que poseen los territorios, las relaciones de  
los actores locales, así como su capacidad para identiꢀcar y apro-  
vechar aquellos en los que reside el potencial de su desarrollo. En  
otras palabras, corroboran su relevancia teórica, metodológica e  
instrumental. No obstante, se reconoce que es necesario continuar  
trabajando en este enfoque para completarlo y encontrar formas  
para medir cada uno de los bienes del capital territorial.  
Palabras clave: desarrollo regional, capital territorial, competitividad regional.  
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Julio-diciembre 2023| Revista Nueva Época |Vol.1 Núm, 2  
Territorial capital: a new interpretative  
and instrumental contribution to regional  
development  
Suárez-Paniagua, S.  
Abstract  
n recent years, new perspectives of analysis on regional spaces  
and their development possibilities have emerged, which show  
I
an interdisciplinary and transdisciplinary approach, as a result of  
recent concepts of space, territory and region, as well as advances  
in the agenda. research on the factors that a±ect the achievement  
of competitiveness and regional development. The purpose of this  
article is to analyze the territorial capital approach, its theoretical  
approaches and methodological proposals, as well as to brie‘y  
examine its application in a research carried out with the aim of  
verifying its theoretical and instrumental pre-eminence. The results  
of our analysis of the study carried out conžrm that the theoretical  
support, the methodological proposals and the empirical eviden-  
ce of the territorial capital approach are transcendent because they  
allow us to glimpse tangible and intangible factors that the territories  
possess, the relationships of local actors, as well as Their ability to  
identify and take advantage of those in which the potential for their  
development lies, in other words, corroborate their theoretical,  
methodological and instrumental relevance. However, it is recognized  
that it is necessary to continue working on this approach to complete it  
and žnd ways to measure each of the territorial capital assets.  
Keywords: regional development, territorial capital, regional competitiveness.  
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Vol.1 Núm, 2 | Revista Nueva Época | Julio-diciembre 2023  
Introducción  
Desde hace algunos años han surgido nuevas interpretaciones sobre  
las regiones con propuestas teóricas y aplicadas para impulsar y al-  
canzar el desarrollo regional. Éstas presentan enfoques cognitivos  
para comprender lo que actualmente llamamos regiones, en los que  
destacan las relaciones complejas que las crean y modižcan, y di-  
lucidan sobre los factores, mecanismos e interacciones que inciden  
en el desempeño de estos territorios. Nuevas interpretaciones que  
adquieren relevancia, por la dižcultad que siempre ha entrañado la  
concepción y delimitación de los espacios regionales, e igualmente  
por la importancia que ha ido adquiriendo la perspectiva de la com-  
petitividad regional e incluso por la necesidad de diseñar y ejecutar  
políticas públicas más adecuadas para el desarrollo regional.  
De ahí, la necesidad de ahondar y avanzar en la construcción  
de nuevos marcos interpretativos que nos permitan, por una parte,  
contar con fundamentos teóricos y metodológicos para comprender  
de manera más conveniente y ‘uida, lo que signižca la región en la  
actualidad, y, por otra parte, discernir sobre lo que representa el de-  
sarrollo regional, particularmente con relación a la competitividad  
territorial o regional. Este imperativo conduce a profundizar sobre  
nuevos aportes teóricos y metodológicos, como el del enfoque del ca-  
pital territorial, que coloca al territorio como el centro del desarrollo  
y que contribuye al análisis de los procesos de desarrollo regional, al  
ponderar que la capacidad de crecimiento y competitividad de una  
región puede forjarse sobre la base de bienes y condiciones que ofrece  
la región, en el contexto de la globalización.  
De ahí que la hipótesis que orienta este trabajo es que el enfoque  
del capital territorial con sus fundamentos teóricos y propuestas  
metodológicas contribuye de manera importante al análisis de los  
procesos de desarrollo territorial, que nos permite profundizar so-  
bre los bienes con los que cuenta un territorio e identižcar aquellos  
que pueden ofrecerle ventajas competitivas, es decir, su patrón de  
desarrollo. Es por ello, que el propósito de este trabajo es exponer  
los fundamentos teóricos y metodológicos de este enfoque y exami-  
nar de manera breve su aplicación en un estudio de caso realizado  
para comprobar su preeminencia teórica e instrumental y su apor-  
tación a las ciencias del desarrollo regional.  
De entrada, la premisa de la que parte la perspectiva del capital  
territorial es la que establece que el territorio está integrado por las  
dimensiones económica, social, cultural, ambiental y política insti-  
tucional, las cuales se interrelacionan, lo que sugiere un abordaje de  
carácter sistémico e integral, es decir, la comprensión del territorio  
como un sistema complejo. Otra proposición en la que se basa esta  
perspectiva es la que considera que las regiones son resultado de  
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Julio-diciembre 2023| Revista Nueva Época |Vol.1 Núm, 2  
relaciones, interacciones, multiplicidad de trayectorias, heterogeneidad,  
y que se encuentran en constante construcción, idea con la cual se  
reconoce que el espacio regional constituye un desa§ío para repre-  
sentarlo y explicarlo (Massey, 2005; Bristow, 2010).  
Ciertamente, el enfoque del capital territorial adopta la propuesta  
interpretativa de región basada en una perspectiva relacional, la cual  
le concede una gran importancia a las relaciones que sostienen los  
actores de este espacio tanto individuales (trabajadores, consumidores,  
políticos) como colectivos (empresas, organismos gubernamentales  
y otras organizaciones) entre sí, pero igualmente a las relaciones que  
mantienen con otros actores de diversos espacios y de distintas escalas,  
es decir, con procesos y circuitos económicos globales (Bristow, 2010).  
La perspectiva relacional coloca a las interacciones entre actores  
e instituciones, y a sus distintas formas de organización social y  
económica, como el centro de análisis e interpretación que permite  
visualizar los espacios regionales, esto es, reconocer su forma, y con  
ello las interacciones entre lo global y local.  
La consecuencia de reconocer las interacciones local-global es  
la valoración de los espacios locales, regionales o nacionales, desde  
una perspectiva territorial, esto es, apreciar la importancia de los  
territorios, lo que contienen, sus recursos, actores y lo que los con-  
ž
gura, así como los ‘ujos y redes que despliegan con otros espacios.  
De lo que deriva la fusión del enfoque relacional y del territorial  
para examinar los espacios en sus distintas escalas, fusión que se  
encuentra en el enfoque del capital territorial.  
De la unión de estos enfoques se deduce que para estudiar y  
delimitar una región (que no necesariamente tiene límites territoria-  
les žjos, o bien que estos cambian rápidamente con el transcurso del  
tiempo) es necesario, por una parte, considerar aquellas características  
esenciales que permiten identižcarlo como territorio o territorios,  
especialmente identižcar a sus actores, y por otra parte reconocer  
sus interacciones económicas, sociales, políticas que despliegan  
en su interior, así como aquellas que establecen con otros espacios  
de distintas escalas, para captar los procesos que la modelan y la  
construyen, comprender que se trata de una región abierta, que se  
encuentra en un contexto de globalización.  
Por otra parte, el enfoque del capital territorial admite que las  
regiones tienen relevancia en un proceso económico que fomenta  
la competencia no sólo entre empresas, sino entre territorios, lo  
que ha llevado a reinterpretar y dotar de un signižcado más amplio  
a lo que se comprende como desarrollo regional, que analiza este  
proceso desde una perspectiva territorial, es decir, presta atención  
a las expresiones territoriales de los procesos económicos, sociales,  
culturales, ambientales y políticos, y sus interrelaciones, que žnal-  
mente se materializan en las prácticas socio-espaciales, aceptando  
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Vol.1 Núm, 2 | Revista Nueva Época | Julio-diciembre 2023  
que son las que permiten explicar los cursos que siguen los territorios,  
en este caso, a escala regional. Asimismo, esta nueva interpretación  
del desarrollo regional, implica ponderar a los actores territoriales,  
sus interacciones, lo que conduce a la comprensión de qué, en realidad,  
los territorios son sistemas territoriales multiescalares y multisi-  
tuados, articulados por conexiones y ‘ujos (Gasca, 2020).  
Precisamente con base en esta perspectiva territorial se propone  
estudiar y elaborar estrategias de desarrollo regional que colocan en  
el centro al territorio, pero ahora introducen como propósito central  
del desarrollo, el logro de la “competitividad territorial”, que reside  
no sólo en alcanzar la competitividad en el ámbito económico, sino  
también en todas las dimensiones presentes en el territorio, a saber:  
económica, socio-cultural, ambiental y político-institucional, como  
lo establece la Comisión Europea a través del Observatorio Europeo  
en su programa LEADE¢ (Comisión Europea, 1999).  
Esta competitividad territorial se comprende no sólo cómo la  
capacidad que deben tener los territorios para enfrentar la com-  
petencia del mercado, sino que también la aptitud de garantizar  
al mismo tiempo “…la sostenibilidad medioambiental, económica,  
social y cultural, mediante prácticas de integración en redes y de ar-  
ticulación territorial” (Observatorio Europeo, 1999, s.p). De tal suer-  
te, que con esta propuesta, se entiende al desarrollo regional como  
el proceso encauzado de las regiones hacia el logro de la compe-  
titividad territorial, tomando en consideración que dicho proceso  
debe contemplar a todas las dimensiones presentes en el territorio  
regional y sus interrelaciones, razón por la cual la región debe ser  
analizada desde una visión sistémica, y con la participación deci-  
siva de las comunidades locales en la construcción de un proyecto  
o agenda regional, en los que se desplieguen estrategias y políticas  
públicas transversales (Boisier, 1999).  
Por supuesto, que el enfoque del capital territorial adopta estos  
principios y propuestas de competitividad territorial, especialmente  
porque se juzga que el desempeño de las regiones sigue siendo disí-  
mil, particularmente respecto a su dimensión económica, mientras  
que unas han logrado tener un mejor desempeño en términos de  
crecimiento económico, otras han tenido un desempeño desfavorable,  
por lo que el propio enfoque del capital territorial trata de esclarecer  
cuáles son los factores que inciden para que algunas regiones sean  
ganadoras en el contexto de competitividad económica y otras sean  
perdedoras.  
Es evidente que, el interés por esclarecer, cuáles son los factores  
que pueden contribuir al logro de la competitividad económica de las  
regiones, y en términos generales para conseguir competitividad terri-  
torial, que conlleva el desarrollo regional, ha dado lugar a la creación  
de nuevos marcos interpretativos y metodologías para examinar a  
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las regiones y ahondar en los factores, mecanismos e interacciones  
que les posibilitan el logro de su competitividad territorial, entre  
ellos, el del “capital territorial”, que a continuación se aborda.  
Nuevo marco interpretativo: el capital territorial  
La categoría de capital territorial se construye desde 1999, cuando  
el Observatorio Europeo LEADE¢ explica que éste “…representa el  
conjunto de elementos a disposición del territorio, de carácter tanto  
material como inmaterial, que puede constituir de cierto modo, activos,  
y de otro, dižcultades”. (1999, pág. 19). Además, enuncia que entre  
los bienes de capital se encuentran: los recursos naturales, la cultura  
e identidad del territorio, los recursos humanos, los conocimientos  
técnicos, las instituciones y administraciones locales, las actividades  
y empresas, los mercados y las relaciones externas, la imagen y  
percepción del territorio (Observatorio Europeo, 1999).  
Más adelante, en el año 2001, la Organización para la Cooperación  
y el Desarrollo Económico (OCDE) amplía su signižcado, señalando  
que se trata de un capital especížco, con el que cuentan los territorios,  
y especížca los elementos que lo integran, entre ellos: la ubicación  
geográžca, su extensión territorial, recursos naturales, clima, tradi-  
ciones, factores de producción, calidad de vida, distritos industriales,  
economías de aglomeración, reglas informales, entendimientos entre  
agentes, así como un factor intangible el “ambiente” que hace posible  
desarrollar creatividad e innovación (OCDE, 2001, pág.15).  
Posteriormente en el año 2008, Roberto Camagni, no sólo  
establece con claridad y precisión el signižcado de la categoría capital  
territorial, sino que desarrolla un nuevo marco interpretativo para  
analizar las regiones y sus posibilidades de desarrollo. Un paradigma  
que surge de la convergencia de los enfoques de crecimiento basados en  
la oferta y de la corriente de desarrollo endógeno –distritos industriales,  
entornos innovadores y sistemas locales de producción (Camagni,  
1
2
021). Para este autor el capita territorial režere a “…todos los activos  
delimitados geográžcamente de naturaleza territorial –ya sean naturales  
o artižciales, materiales o inmateriales, cognitivos, sociales, culturales  
o identitarios- en los cuales reside el potencial de competitividad  
ƴCamagni aclara que el concepto de capital generalmente se ha utilizado para referirse  
a un bien, o acervo de un recurso acumulado a lo largo del tiempo y que genera un flujo  
de beneficios, e igualmente que debe acumularse mediante un proceso de inversión que  
implique costos y debe ser enajenable, lo que sin duda se cumple en el caso de bienes  
materiales, sin embargo, desde su punto de vista existen otro tipo de bienes que son  
inmateriales y colectivos, los cuales también pueden ser considerados como capital, por-  
que generalmente también implican costos y su uso en funciones de cuasi-producción  
justifica su incorporación como elementos del capital (Camagni, 2009, p.121; 2020, p.40).  
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